Enoturismo, una forma de rendir culto al vino

Una copa de delicioso vino y un paisaje maravilloso resumen el significado del enoturismo, una creativa manera de gestionar la industria vitivinícola nacional a través de la actividad turística. Esta modalidad adquiere la forma de un circuito al enriquecerse también con el aporte de la gastronomía en los maridajes y de la belleza en los spa del vino.
En Bolivia, el enoturismo es fruto de las iniciativas separadas de las bodegas, sobre todo en Tarija, pero gracias al proyecto conjunto Vinos de Bolivia, es posible que en un futuro no muy lejano se consolide una “Ruta del vino” integradora y más sólida.

un reto. Según el blog ''cata buen vino'', Latinoamérica ya tiene una ruta que integra a Uruguay, Brasil, Chile y Argentina, al respecto, Bolivia está un poco relegada, el experto en vinos Ramón Freixa hace una reflexión, ''Lástima que se olvidaron de Tarija, la cuna del vino de altura, pero creo que todavía están a tiempo de subsanar el error'', añade.

BOLIVIa. Las bodegas más grandes han iniciado, aún por separado, iniciativas para promover enoturismo. Kohlberg invita a participar en la vendimia de febrero a abril, cuando se puede cosechar y pisar la uva. La Concepción tiene paquetes desde Bs 20, que incluyen visitas a la bodega con degustaciones de vino y singani, que duran media hora, cuestan Bs 20, también hay el paquete con recorrido por bodegas y viñedos, cata de varietal, reserva y maridaje con quesos y jamones, duración de dos horas a Bs 140 ó el de Bs 200 que dura tres horas y además de lo anterior incluye una actividad, cosechar la uva y saborear platos tarijeños. Casa Grande muy pronto abrirá un spa con baños de vino. Campos de Solana tiene actividades por vendimia y degustaciones, mientras que Aranjuez ahora está en plena carrera ciclística por la vendimia

3 meses es el tiempo que falta para inaugurar el spa del vino.

5 bodegas en Bolivia se unieron para fortalecer al sector.