El alcalde de Copacabana, Emil Quispe, se declaró impotente a la hora de impedir la destrucción de las ruinas, ya que, aseguró, no cuenta con la autoridad ni el presupuesto para intervenir en la situación.
“Nosotros, como gobierno municipal, no podemos cubrir los aspectos de mantenimiento, cuidado ni de seguir realizando excavaciones en el lugar. Nos falta dinero para nuestras obras”, declaró la autoridad.
Asimismo, el burgomaestre indicó que el sitio arqueológico se encuentra en un predio particular que pertenece a la organización campesina. “La federación es dueña de este terreno. Tienen todos los documentos. Por otro lado, ese terreno fue abandonado por las anteriores gestiones del Ministerio de Culturas”, agregó.
La Razón no pudo contactarse con autoridades de Patrimonio del Ministerio de Culturas, respecto a la amenaza y la situación del sitio.
En 2008, el arqueólogo peruano Sergio Chávez inició excavaciones en el lugar ante el primer anuncio de la construcción del mercado. Esa ocasión se descubrió que el sitio albergaba, además de restos humanos, cerámicas, tejidos y piezas de metal.
El año pasado, la entonces ministra de Culturas, Zulma Yugar, firmó un convenio que determinaba la construcción de un museo. Sin embargo, el proyecto no se concretó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario