Riqueza interminable. Cuando alguien mencionó que con los minerales extraídos del Cerro Rico se podría construir un puente entre Potosí y Madrid no exageraron, es más, quizás la aseveración quedó corta, ya que hasta ahora continúan ofreciendo sus riquezas al mundo.
Plata, estaño y zinc son extraídos de las bocaminas de este cerro que se encuentra a 4.702 metros sobre el nivel del mar. Toda la historia que atesora este monumento la han convertido en el principal atractivo de Potosí, pero además, le valió para ser nominada Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad en 1986.
La mina Pailaviri es la más grande de este monumento y está habilitada para que los turistas puedan visitarla. Las vetas impresionan por la grandiosidad y belleza natural de sus grutas y cuevas.
Conventos con historia. Los conventos e iglesias tienen un gran valor arquitectónico.
La Torre de la Compañía de Jesús es uno de los símbolos de la ciudad. Es un convento de piedra de estilo mestizo, predominante en el siglo XVIII. Fue edificado como un arco del triunfo, con cinco aberturas, treinta y dos columnas salomónicas y tres cúpulas de media naranja. Es tal la importancia de este monumento que hasta se encuentra impresa en los billetes de Bs 50.
El museo de Santa Teresa, construido en 1761, guarda una bella colección de cuadros y objetos religiosos, un aspecto interesante es que sus moradoras elaboran deliciosos dulces de mazapán.
Símbolos indígenas. El Arco de Cobija es uno de los símbolos más importantes. Servía para dividir la ciudad en dos, una donde vivían los indígenas y la otra de los españoles.
Es un monumento con una gran carga histórica y social. La parroquia Santa Bárbara también tiene mucho de historia en este aspecto. Considerada de primera iglesia de indios Omasuyos en la cuidad indígena de Potosí, que data del siglo XVI. Actualmente solo permanece la torre como testigo de lo que fue la parroquia.
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