domingo, 16 de junio de 2013

Cultura y tradición en la Riviera Nayarit

A lo largo de la costa nayarita se extienden playas para todos los gustos: algunas con exclusivos complejos hoteleros para quienes buscan lujo; otras poco concurridas para quienes prefieren tranquilidad; y algunas ideales para los amantes de los deportes acuáticos. Todo un turismo a la carta.

A todos estos atractivos hay que sumarles, además, parques temáticos, jungla y selva, resorts, manglares y poblados pintorescos con culturas muy arraigadas.

Además, para el gozo y disfrute familiar, pero sobre todo, para el de de los más pequeños, esta zona de México alberga varios parques temáticos, entre los que sobresalen los de Aquaventura y Splash Vallarta, que cuentan con toboganes, espectáculos con delfines y leones marinos, y espacios verdes.

Nadar con delfines

En Nuevo Vallarta y Punta Mita, situado a unos 25 kilómetros al norte de su vecina, Puerto Vallarta, encontrará los mejores complejos hoteleros, marinas, centros comerciales, extensos campos de golf (se destaca el imponente campo del Hotel Four Seasons) y toda la infraestructura necesaria para practicar deporte. Lo tiene todo al lado: la bahía de Banderas o la jungla de Sierra Madre. En esta región es posible nadar con delfines y degustar una gastronomía deliciosamente mexicana (pero también internacional).

Esta localidad es ideal para quienes quieran vivir la noche. El amplio malecón ofrece cientos de bares, restaurantes y discotecas. Punta Mita se dibuja por el océano Pacífico, con extensas playas y calas. Su público, por ahora, es el de alto nivel adquisitivo.

A pocos kilómetros de allí (30 minutos en coche), se encuentra Sayulita, una coqueta aldea de pescadores donde se puede practicar surf. El turista podrá disfrutar de la cultura local en medio de un ambiente sosegado y bohemio. Allí se puede acampar. Pero por lo que es mundialmente conocida es por el torneo de surf que tiene lugar en marzo. Surfistas de todo el mundo se dan cita allí durante el campeonato. Las olas son un regalo de los dioses.

Otros lugares tranquilos y con una extraordinaria riqueza natural son Flamingos, repleto de hermosos lagos; Bucerías, un recóndito espacio de calles empedradas y una playa muy larga; La Cruz de Huanacaxtle; Destiladeras, para los amantes del surf; e Islas Marieta, una notable reserva ecológica.

Más que agua azul

El municipio de San Blas, situado en el norte del corredor, a cuatro horas de Puerto Vallarta, cuenta con interesantes vestigios arqueológicos y con naturaleza por doquier.

Una opción es hacer el recorrido por los manglares de La Tovara o visitar la Isla Isabel, avistar aves en Singayta o practicar surf en Bahía Matanchén.

Muy cerca de Rincón de Guayabitas, un paraíso de aguas cristalinas, se ubica el imponente santuario prehispánico de Altavista, en el municipio de Compostela, y Los Toriles, en Ixtlán del Río, así como la playa de Chacala.

Otro lugar que no puede dejar de visitar si se decide por la zona es la isla de Mexcaltitán, al noroeste de Santiago Ixcuintla, con un pasado histórico que afirma que fue el punto de partida de los mexicas, fundadores de Tenochtitlán, en el centro de México.

Para los amantes de la flora y fauna (jaguares, cocodrilos y pantanos) está la falda del volcán La Tovara, donde sólo se puede acceder por barca sin motor para preservar el entorno ecológico de la zona.

Los huicholes y otras etnias

La Riviera Nayarit esconde costumbres muy arraigadas y originales tradiciones. El grupo étnico que allí vive es el de los huicholes, originario de la Sierra Madre.

Éste se distingue por un vestuario muy colorido y unos sombreros ribeteados con plumas. Ellos son los que hacen la artesanía llamada shakira, entre la que se destacan máscaras, bolsos y joyas.

Las figuras representan a sus ancestros o a sus deidades. También conocidos como wixáricas (Hijos del Sol), los huicholes peregrinan a cinco lugares sagrados. Uno de ellos es el Tatei Amara (Piedra Blanca), que se ubica en el Puerto de San Blas.

La etnia de los indios coras, asentada en el municipio de Nayar, trabaja la cerámica. Los tepehuanos viven en Huajicori y resaltan sus bellas mochilas de lana, sombreros y ollas de barro.

Los mexicaneros conviven en el mismo territorio de las otras etnias y entre sus actividades se encuentra la de fabricar canastas, cestos y chiquihuites de otate, piezas de madera, redes de ixtle y morrales de estambre.

A todo esto hay que sumar la extensa y variada oferta gastronómica. Mariscos frescos cocinados con un toque prehispánico, manjares como albóndigas con camarón, el famoso pescado zarandeado, aguachile, chicharrón de pescado, tamales de camarón y un largo y sabroso etcétera.

No se pierda las delicias de los Tacos Marlin, un pequeño local situado frente al aeropuerto de Puerto Vallarta que creció en fama con los comentarios de la gente.

Un viaje que le enriquecerá en todos los sentidos (EFE Reportajes).

Los parques temáticos


Además de las playas y bahías, hay una amplia variedad de parques temáticos en la riviera, entre los que sobresalen los parques acuáticos Aquaventuras y Splash Vallarta.

Estos lugares cuentan con áreas verdes, toboganes, shows con delfines y leones marinos, así como programas especiales donde los visitantes pueden interactuar con ellos.

El parque Sea Life Park, en Nuevo Vallarta, es un parque acuático familiar. Los shows con delfines se inician a las 10:00 y continúan hasta las 16:00.

Además de nadar con los delfines, puede practicar esnorquel e, incluso, realizar aerobics acuáticos y otras acrobacias con ellos.

Con algo para toda la familia, el Sea Life Park ofrece nueve resbaladeros, así como una gran alberca, diez toboganes de río, un restaurante y varios snack bar.

Este parque acuático de seis hectáreas incluye a talentosos leones marinos y aves exóticas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario