En medio de alegría, música y ofrendas en el espacio arqueológico del municipio de Tiwanaku, miles de visitantes propios y extraños realizaron ofrendas a la denominada Madre Tierra y con las manos en alto procedieron a esperar los primeros rayos de sol para recibir la supuesta energía característica del Año Nuevo Aymara.
A este evento asistieron el presidente Evo Morales y vicepresidente Álvaro García Linera, quienes con sus manos levantadas recibieron los primeros rayos de sol del Nuevo Año Andino Amazónico 5521.
En su intervención, el Primer Mandatario manifestó que en esta fecha los bolivianos deben reflexionar acerca de la situación actual.
“Instamos a trabajar por la igualdad, en unidad por la dignidad y atendiendo a sectores más abandonados del territorio de Bolivia y compartiendo muchas experiencias por el bien de quienes habitan el planeta tierra”, dijo.
La celebración, inscrita en el calendario ancestral de los pueblos originarios de los andes sudamericanos, coincide con el momento en que el sol se aleja de la Tierra y con el advenimiento de la estación de invierno.
A nivel nacional, esta celebración se escenificó en más de 200 sitios arqueológicos de Bolivia, entre ellos El Fuerte de Samaipata, Salar de Uyuni, entre otros.
LA PAZ
En la ciudad de La Paz las personas que asistieron al acto del Año Nuevo Andino Amazónico se concentraron en diferentes puntos del país, en el parque Laikacota los participantes fueron bautizados con un nombre aymara de acuerdo a la fecha de nacimiento y participar en toda la ceremonia y el apthapi, según el director de Promoción Cultural, Andrés Zaratti.
“El parque Laikacota, que es considerada una Wak’a antigua. Al igual que el resto de recepciones va a conllevar el tema de la ritualidad de poner la mesa, de recibir los primeros rayos del sol y finalizará en el Templete subterráneo del Estadio, donde vamos a tener un apthapi y una ceremonia de nombramiento a la población asistente, con nombres aymaras”, explicó la autoridad.
En esta ceremonia participarán amautas (sacerdotes aymaras) de La Paz y de El Alto estuvieron dirigida por las autoridades de cada macrodistrito. Adelantó que la ritualidad en esta ceremonia será rígida, toda vez que se realizó una coordinación estricta por la Delegación de Interculturalidad de la Alcaldía.
Asimismo, Zaratti recordó que el Gobierno Municipal paceño fue uno de los primeros municipios en asumir y realizar esta práctica desde el 2001, como una política municipal.
Por otra parte, se realizarán rituales similares en otros lugares del municipio, considerados también Apachetas o lugares sagrados, como el Valle de la Luna, el mirador de Killi Killi y el Huayna Potosí, entre otros.
EXCESOS
Pese a una serie de recomendaciones para evitar el exceso y venta de bebidas alcohólicas, para combatir los efectos del exagerado consumo de bebidas espirituosas, en los diferentes puntos de encuentro se pudo advertir el excesivo consumo de bebidas alcohólicas que derivaban, en riñas, peleas, y el ornato público concluía en baños al aire libre.
Pese a la seguridad que se desplaza cada año, esta es una actividad que no se puede evitar dentro de manifestaciones donde se congregan más de 30 mil espectadores como en el caso de Tiwanaku.
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