Filas, pérdidas de vuelos, tráfico, robo de documentos, olvido de vacunas obligatorias, hurtos, atrasos, cancelaciones, dificultad de comunicación y enfermedades lejos de casa. Esta es una pequeña lista de imprevistos que pueden perturbar mucho el viaje de cualquier persona, sea un viajero corporativo o de ocio. Algunos disturbios son imponderables, pero otros sí pueden ser minimizados o hasta eliminados. Y es centrados en eso que trabajamos todos los días en Amadeus.
El sueño de tener un viaje sin problemas es compartido por todos y, para nosotros, es una verdadera obsesión. Las tecnologías actuales han mejorado mucho la experiencia general de los viajes, sin embargo, nunca está demás invertir en mejoras en la experiencia del usuario.
Pero antes de mejorar tal experiencia, primero es necesario preguntarse qué es un “viaje sin problemas” (derivado del término en inglés “seamless travel”). Cada persona tiene una prioridad a la hora de viajar. Para algunos, lo más importante es no hacer filas. Para otros viajeros, obtener flexibilidad para anticipar un vuelo es crucial.
Diferentes visiones requieren diferentes soluciones para que a todos los viajeros se les cumpla el sueño de disfrutar al máximo sus viajes. Escuchar a los usuarios es la mejor manera para saber cuál camino tomar a la hora de desarrollar tecnología para el sector. Como nuestros ejecutivos también son usuarios, tenemos aquí una pequeña muestra — no científica — de lo que puede hacerse con las opiniones de los viajeros.
Para mostrar esas diferencias, preguntamos a los directores de Amadeus en América Latina qué sería “seamless travel” para ellos. Por ejemplo, para Cecilia Sicardi, directora de Recursos Humanos de Amadeus en la región, es un “viaje libre de perturbaciones, basado en la experiencia del pasajero desde que sale de su casa hasta su vuelta”.
La visión de Cecilia es compartida por Mariano Gutiérrez, director de Latam Solutions Center: “Para mí es un viaje sin sobresaltos, o sea, sin angustias provenientes de inconvenientes inesperados y fuera de control inmediato”.
Pero también están aquellos que desean tener el placer de viajar en su plenitud y sólo consideran que un viaje es perfecto si tiene ese condimento de encanto: “Es tener placer y diversión en los procesos para realizar un viaje, desde su concepción, compra, hasta su experiencia en el aeropuerto y el retorno a su casa”, dice André Shirai, director de Marketing y Productos.
Claudio Altieri, director de Nuevos Negocios y Operaciones, por ejemplo, enumeró cinco cuestiones que son fundamentales para que su viaje sea considerado sin problemas: 1) Lidiar con un único proveedor en todo el trayecto; 2) Mejor servicio de emergencias en caso de problemas; 3) Servicios digitales de check-in y conserjería en una única aplicación; 4) Recibir sugerencias en el destino que ya vengan informadas de sus preferencias personales; y 5) evitar filas.
En una cosa hay consenso: cuantas menos preguntas los viajeros tengan que hacer para entender los procesos involucrados en el viaje, más lealtad ganarán los proveedores, clientes más satisfechos y que viajan con más frecuencia.
“Para mí, un viaje sin problemas es no tener que responder las mismas preguntas una y otra vez. ¿Nombre? ¿Número de pasaporte? ¿E-mail? ¿Teléfono? Quiero un log in y que todos mis datos estén ahí”, dice Jorge Reynardus, director de Asuntos Legales.
Al final, lo que todos quieren es que el viaje sea algo sin problemas, algo que no necesite de mucha explicación, pero que sea intuitivo. Esta fue exactamente la respuesta de Pablo Chalén, director comercial del Norte de América Latina.
¿Y para Usted, qué es un viaje sin problemas?
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