Sea por disfrutar el paisaje o alcanzar la meta propuesta, sigues adelante. Nada se interpone entre tú, la bicicleta y el camino, solamente podría tu falta de persistencia. Cambias la marcha, la reduces para aligerar los calambres, avanzando más lento para llegar más lejos; o la incrementas para abarcar mayor distancia en menor tiempo, presionando tu cuerpo al límite, de acuerdo a tu estrategia. Se acaba el energizante y solamente cuentas con tu voluntad y tu "compañera”, ambos conforman el imbatible equipo.
Tras varios minutos de voluntaria agonía, llegas al punto de arribo. Alcanzas la cima, la tan añorada cima, dejas la bicicleta y por un momento no existe nada más entre tú y la magnificente vista, conquistando la cumbre.
Con varios picos alrededor, únicos testigos de tu hazaña, una hazaña silente, observas el entorno y concluyes que valió la pena el tiempo y esfuerzo invertido. Tu cuerpo lo resiente, sin embargo tu orgullo personal, tu mente y tu vista lo agradecen.
Cuando comienzas en este deporte, comienzas solo. De hecho, él te encuentra a ti y no al revés.
En retrospectiva, te agradeces la persistencia mantenida luego de tus primeras caídas muchos años atrás, sin ellas no estarías aquí. Ellas ya están lejos, mas la cima se encuentra cerca tuyo.
De hecho, eres tú quien coronas esa cima con tu esfuerzo. Una vez allí, no existen futuro ni pasado, solamente el presente, tu compañera y tú.
Se dice que la vida no es un destino en sí mismo sino el hecho de disfrutar la travesía, el ciclismo de montaña lo ejemplifica cabalmente.
Uno a uno van sumándose los colegas. Inicialmente los saludas cuando se cruzan en el camino. Luego, los vuelves a ver por la ruta. Alguna vez las rutas coinciden y, poco a poco, vas coincidiendo en objetivos comunes.
Con esta consigna en mente, tres aventureros del camino, gracias a un amigo en común, coinciden en 2014 para compartir ideas respecto a bicicletas, rutas y cimas que conquistar. La idea de formar un club de ciclismo orgullosamente paceño comienza a tomar forma.
Uno de ellos sugiere que el club lleve el nombre de la montaña vigilante de la sede de Gobierno y que el adjetivo se encuentre referido a la pasión que los une. Otro, sugiere que el sustantivo refleje la idea de un grupo de amigos que comparten las salidas (dominicales, inicialmente).
Así nace, tres años atrás, el club paceño de ciclismo de montaña Illimani Biking Bunch (IBB), con la decidida participación de Alejandro Frank, Víctor Yaffar y Carlos Fossati.
Poco a poco se van uniendo algunos compañeros del camino. El grupo comienza a sumar, en promedio, un simpatizante cada mes y, poco a poco, la propia pasión por el ecodeporte de dos ruedas sería el motor que coadyuve para consolidar el club, con el objetivo de conquistar el camino y la cima de la montaña cada domingo.
Mientras te integras con tu compañera hacia el camino, los problemas se congelan, las preocupaciones se mantienen en stand-by y todo lo demás se ralentiza. Sólo esperas la siguiente salida para conquistar una nueva ruta y compatibilizar, de alguna manera, tu meta personal con la de tus compañeros de club y del camino.
Hoy, Illimani Biking Bunch, en lo referido al ciclismo de montaña, es ya un referente icónico en La Paz. El hijo camina solo. Cada domingo, un grupo diferente de aficionados parte, de algún punto de La Paz con el objetivo de alcanzar una cima diferente u otro objetivo en común. Ayudados ahora por las aplicaciones de celular, redes sociales, GPS y mapas, así como la experiencia de los pioneros del camino, se comienzan a consensuar rutas, horarios, a extender los paseos, compartir información y proseguir con la afición, acrecentando el abanico de nuevas rutas.
En el transcurrir de los meses de 2015 y 2016 se incrementan los subgrupos del IBB. Unos participando de descenso. Otros compitiendo en carreras oficiales, grupos de paseos urbanos, off-road, paseos dominicales estándar, diurnos y nocturnos, así como grupos dentro y fuera de la ciudad.
Comienza a correr la voz y, una a una, damas ciclistas aceptan el reto y se unen a las filas del IBB, coadyuvando en la consolidación de un club más sólido, inclusivo y en constante expansión.
En los últimos meses el número de nuevos participantes se ha disparado a más de un centenar de personas que participan de manera permanente en sus diferentes actividades, sin más requisito que el compromiso de compartir esta pasión.
Posteriormente, se promueve el deporte junto a la Alcaldía paceña para facilitar rutas, la empresa Mi Teleférico, que posibilitó el transporte regulado de bicicletas y, junto a Masa crítica (reuniones mensuales de todos los clubes de La Paz para promocionar el ciclismo en la ciudad maravilla) se fortalece aún más la experiencia.
No debemos olvidar que recientes estudios han demostrado que el ciclismo es un deporte bastante completo. A pesar de ser considerado deporte de bajo impacto, se llega a quemar alrededor de 500 calorías en una hora, mejorando el ritmo cardiaco. Igualmente, un estudio de 2008 ha demostrado que, tras seis semanas de bicicleta a una intensidad baja y moderada, la sensación de fatiga disminuye y se incrementan los niveles de energía.
Fuera del hecho que los ciclistas puedan verse más atractivos (según un estudio de la British Heart Foundation, en el cual la gente admitió que preferiría quedarse con un ciclista frente a otro tipo de atletas), la bicicleta mejorará tu estándar y calidad de vida, bueno, tal vez no te haga más longevo, mas la intensidad del ejercicio te permitirá vivir una vida más sana.
Con un creciente grupo de aficionados, Illimani Biking Bunch es el grupo de ciclismo de montaña que te esperará cada domingo, si tú lo permites, para retar tu mente y persistencia. ¿Qué esperas? Sólo necesitas desempolvar a tu vieja compañera, un casco de seguridad y unirte a la aventura dominical.
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