El sector sentencia que, cuando haya turismo, previsto recién para el próximo año y las fronteras se abran, ya no habrá empresas turísticas de pie
Para la “industria sin chimenea”, el Programa Nacional de Reactivación del Empleo, aprobado por el Gobierno, con el Decreto Supremo (DS) 4272, no los beneficia directamente, pese a ser el sector más afectado por la crisis ante la emergencia sanitaria por el coronavirus. Piden al Gobierno, una normativa complementaria para impedir el inminente cierre de más de 400 empresas turísticas en el país.
Raúl Calvimontes, presidente de la Cámara Nacional de Operadores de Turismo (Canotur), dijo que el análisis que hizo el sector privado de turismo, donde están operadores, agencias, mayoristas, etc, es que este decreto, no beneficia directamente a las empresas de turismo. "Lo que solicitamos es que se pueda hacer un decreto complementario, pero esta vez para las empresas, con las mismas características que para los usuarios del turismo", manifestó a EL DEBER.Más adelante, aclaró que no estaban pidiendo subsidios ni regalo de dinero, "solicitamos créditos para reactivarnos”, precisó.
El sector se reunió el jueves con las autoridades del Gobierno, donde se les explicó los alcances de la nueva normativa. Después de un análisis, coincidieron que el DS 4272 no los toca con beneficios directos.
La actividad se paralizó desde el año pasado, cuando sucedieron los conflictos políticos, luego de las elecciones generales del 20 de octubre de 2019. Tras superada la situación, nuevamente desde marzo, se restringió la movilización de las personas y más tarde se cerraron las fronteras internacionales, dejando al turismo totalmente paralizado.
El Decreto 4272
La normativa aprueba el Programa Nacional de Reactivación del Empleo como un conjunto de medidas, en un marco de ajustes administrativos y disciplina fiscal en el sector público que permita enfrentar los efectos del coronavirus, priorizando los sectores que requieren mayor inversión pública y fomentando el consumo de productos nacionales para apoyar la recuperación del aparato productivo mediante la inyección de recursos.
El artículo 68 de la Sección IV (sector turismo) facilita la reprogramación de la cartera de crédito de las empresas turísticas, para la continuación de sus labores.
El artículo 69 señala que, como medida de fomento para un turismo planificado y programado, las personas podrán acceder a créditos, a fin de adquirir paquetes y servicios turísticos con tasas preferenciales.
El artículo 70, como medida de fomento para un turismo planificado y programado, se establece para el sector público, la vacación obligatoria de al menos 10 días hábiles consecutivos entre el 1 de diciembre y el 28 de febrero. El sector privado podrá aplicar lo establecido en el presente artículo, por acuerdo entre partes, considerando sus modalidades y horarios de trabajo.
Sin apoyo
Canotur observó que el primer artículo apoya a las empresas en el tema de créditos, pero son préstamos que ya se tenían en el pasado. Aunque dicen estar conscientes de que es una ayuda, no es suficiente para enfrentar el futuro de la iniciativa empresarial que soporta a al menos 580.000 empleos directos e indirectos.
El segundo artículo apunta a créditos para usuarios del turismo, pero no ven ningún beneficio para las empresas que van a crear paquetes y van a poner en circulación a los turistas nacionales.
El tercer decreto también apunta a vacaciones para los trabajadores públicos y privados.
Calvimontes sostuvo que tienen varias responsabilidades y son cuatro meses que vienen soportando la carga social de todos sus dependientes, no pueden darle vacaciones para que puedan dejar las oficinas o despedirlos porque va en contra de la ley.
Señaló que se ha diferido un poco el tema de los impuestos, pero a partir de julio van a tener que seguir pagando. "Aún no se habló de patentes a escala municipal. Hasta Fundempresa nos avisó que debemos pagar la actualización de matrículas hasta el 31 de julio. Se viene una serie de cargas, impuestos y contribuciones”, alertó Calvimontes.
Las empresas turísticas preguntan cómo seguirán manteniendo a sus dependientes, manteniendo la estabilidad de la empresa para crear paquetes turísticos. “Cuando haya turismo, ya no habrá empresas”, sentenció.