sábado, 4 de enero de 2025

En su bicentenario, Bolivia apuesta por reforzar su imagen turística en el exterior

 Desiertos blancos, selvas impenetrables, ciudades coloniales, cañones profundos y pueblos mágicos, Bolivia cuenta con una infinidad de destinos turísticos espectaculares y atractivos para cualquier amante de los viajes y en este 2025, año del Bicentenario de la independencia, el país invita a los visitantes extranjeros a conocerlos.

“Tenemos una infinidad de destinos para todos los gustos, pero nos falta promocionarlos en el extranjero de manera más intensiva, además de generar las condiciones para que los visitantes puedan pasar su estancia de manera cómoda”, explica José Fernando Villagra, director de la carrera de Administración en Hotelería y Turismo (AHT) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.

Villagra, citando datos recopilados por el Centro de Investigación, Innovación y Transformación Digital en Turismo (CIINTUR) de Unifranz, indica que los turistas que visitan Bolivia resaltan la belleza de los destinos; sin embargo, reconocen que existen ciertas falencias en la infraestructura, caminos y atención que reciben.

De la misma manera, indican que la promoción internacional de los destinos es casi inexistente y que el boca a boca o las recomendaciones en foros de internet son la principal vía de promoción del país.

“Tenemos un gran potencial, pero necesitamos promoción y trabajo duro para poder posicionar al país en lo más alto”.

Ante esta situación, recientemente, el Viceministerio de Turismo lanzó una convocatoria para encontrar los 200 destinos del bicentenario, de los cuales, los 20 mejores serán promocionados internacionalmente.

Según la proyección que se tiene en la agenda del Bicentenario, se pretende alcanzar los 2,5 millones de visitantes.

Además, que en el bicentenario se promocionará y fortalecerá la convivencia social a través del turismo comunitario.

También se prevé promocionar “circuitos turísticos e históricos” que conmemoran los 200 años de fundación de Bolivia, consistente en el desarrollo de paseos dirigidos a estudiantes del nivel secundario del Sistema Educativo en los diferentes municipios del país.

Tipo de turistas

Según Javier Rivera, director de la carrera de AHT de Unifranz en Santa Cruz, los turistas que visitan Bolivia lo hacen buscando dos tipos de experiencias: aventura y cultura.

“Usualmente las personas que llegan a Bolivia lo hacen buscando dos tipos de experiencias. Por un lado, la belleza natural de sitios que no van a poder encontrar en otras partes del mundo, como el Salar de Uyuni o el Madidi y, por otra parte, buscan el turismo cultural. En este sentido, intentan conectar con las culturas locales, aprender de ellas, ver sus procesos de producción, ver todo el conocimiento adquirido a través de generaciones y eso se ve a través de su cultura. Todo aquello que es resaltante como la belleza del salar, la exuberancia del Madidi o la experiencia de vivir en una ciudad de altura como La Paz son los detonantes que llaman la atención del que se anima visitar Bolivia”, dice el experto.

Siguiendo esta clasificación, Rivera recomienda cinco destinos turísticos para visitar en el año del Bicentenario de Bolivia.

Salar de Uyuni

El Salar de Uyuni es el desierto de sal más alto y grande del mundo. Su extensión es de aproximadamente 12.000 km2. Además, es la mayor reserva mundial de litio del continente.

En época de lluvias, el agua queda en la superficie del Salar y produce un reflejo como el de un espejo. Muchos turistas lo visitan sólo para apreciar ese paisaje ya que el horizonte se pierde en el reflejo, el cielo se confunde con él y parecería flotar en las nubes. 

Madidi

El Madidi es la reserva natural y área protegida más rica del mundo, que se expresa en la diversidad de ecosistemas y de especies de flora y fauna. Contiene 12 grandes formaciones vegetales, el mejor ejemplo de sabanas prístinas y los bosques montanos más extensos y mejor conservados de Bolivia. 

Por otra parte, es un área de gran diversidad cultural, habitada por diversos grupos culturales de habla tacana: toromonas, araonas, ixiamas, tacanas, cavinas, esse ejjas, uchupiamonas, eparamonas y pamainos. También compartieron el territorio comunidades de origen leco.

Sucre y Potosí

La capital del país es un destino imperdible en el año del bicentenario, lugares como la Casa de la Libertad, edificio histórico donde se firmó la Declaración de Independencia de Bolivia en 1825, la Recoleta, antiguo convento franciscano que ahora alberga un museo y una iglesia, el cementerio general, conocido por sus elaboradas tumbas y mausoleos y el Castillo de la Glorieta, una construcción única en su tipo en Bolivia.

Potosí, por su parte, guarda en sus calles el estilo colonial que la hizo una ciudad cosmopolita e importante durante el auge de la plata que se extraía de su Cerro Rico. Entre sus mayores atractivos se encuentran las iglesias y catedrales y la Casa de la Moneda.

Toro Toro

Ubicado en el departamento de Potosí. El parque nacional de Toro Toro es un lugar detenido en el tiempo, marcado por las huellas que dejaron los dinosaurios que pasearon por sus tierras hace millones de años.    

Su cañón, el Vergel, la cueva de Umajalanta y la Ciudad de Itas son otros de los atractivos que ofrece este destino, que además es un punto mundial para la observación de aves y el ecoturismo en el país.

Samaipata

Samaipata se ha ganado el corazón de los turistas internacionales que llegan cada año al municipio ubicado en el departamento de Santa Cruz a visitar su más grande atractivo, “El Fuerte” una roca tallada de hace más de 2 mil años, declarada por la Unesco como Patrimonio Cultural de la Humanidad. 

Samaipata es, además, un sitio de encuentro de muchas culturas donde se festeja el Lucero del Alba, que para la cultura Guaraní significa el inicio de un nuevo amanecer renovando las esperanzas y la luz que los encamina a la “tierra sin mal”.
En su bicentenario, Bolivia apuesta por reforzar su imagen turística en el exterior


viernes, 3 de enero de 2025

Estudiantes crean Observatorio Turístico del circuito Salar de Uyuni y lagunas de colores

 El turismo es una de las actividades económicas con mayor potencial en el país, gracias a sus grandes atractivos naturales, culturales e históricos. Al mismo tiempo es un sector sostenible que afecta positiva y directamente a las comunidades donde se realiza. Por este motivo, un grupo de estudiantes de Administración de Hotelería y Turismo crearon un Observatorio Turístico para el Salar de Uyuni y las lagunas de colores, dos de los mayores atractivos que tiene Bolivia para los visitantes.

El salar más grande del mundo atrae, cada año, a miles de turistas de los cuatro confines de la tierra, cautivándolos con sus impresionantes vistas y también con su historia y cultura. Sin embargo, el potencial de esta maravilla natural no está completamente explotado, ya que se requieren ajustes y cambios para poder mejorar la experiencia de los turistas.

“El actual proyecto se llevó a cabo en uno de los mayores atractivos turísticos de Bolivia, el salar de Uyuni, ubicado en el departamento de Potosí, bajo un convenio realizado por la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, la Mancomunidad de Tierra de los Gran Lipez y el Gobierno Autónomo Municipal de Uyuni. El propósito del proyecto es fomentar y potenciar la actividad turística que se desarrolla en el circuito, gracias a un Observatorio Turístico”, explica Josué Colque, uno de los 16 estudiantes de Unifranz que fue parte de este proyecto integrador.

Un proyecto en cuatro fases

Según el estudiante, el proyecto fue estructurado en cuatro fases: 

La primera incluye la inventariación y jerarquización dentro del circuito Salar de Uyuni, donde se identificaron 48 atractivos turísticos. En esta fase se aplicó la nueva metodología del Viceministerio de Turismo y se realizó el estudio de la demanda mediante entrevistas a diferentes prestadores de servicios para identificar el gasto promedio y los tipos de tours que ofrecen. 

“Además, se desarrollaron cinco mapas temáticos disponibles en Google Maps, que reflejan el municipio de Uyuni, sus servicios turísticos, la infraestructura turística y las rutas del Full Day y del circuito de dos días y una noche”, acota.

La segunda fase, denominada "Plan de mejora de servicios turísticos", utilizó el análisis FODA para identificar puntos de mejora en los atractivos y servicios turísticos del circuito. 

“En cuanto al análisis de la infraestructura, se registraron los servicios básicos brindados a los turistas, con énfasis en telecomunicación y conectividad de Internet, que están limitadas en algunas zonas del circuito. También se observó la falta de señalización vial y turística, lo que requiere atención”, agrega.

La tercera fase, denominada "Programa de Fortalecimiento de Capacidades para Prestadores de Servicios Turísticos", identificó seis temas para las capacitaciones: alimentos y bebidas, hospedaje, operación turística, transporte, viaje y promoción turística.

Colque indica que en los talleres realizados se capacitaron a más de 120 personas, incluyendo hombres, mujeres, adultos y jóvenes de varios municipios. 

También se realizó un estudio de demanda, encuestando a 320 turistas nacionales y 460 extranjeros. El estudio se dividió en cuatro partes: datos demográficos, motivacionales, toma de decisiones y grado de satisfacción. Los datos permitieron generar un perfil del turista.

“Por ejemplo, se halló que los turistas nacionales y extranjeros, con edades entre 20 y 30 años, visitan Uyuni en abril. Los países de origen más comunes son España y Perú, y a nivel nacional, la ciudad de La Paz. Los turistas extranjeros buscan turismo de aventura, mientras que los nacionales lo hacen por vacaciones. Ambos grupos disfrutan de la fotografía y suelen ir acompañados de amigos”.

Además, se recopilaron datos adicionales respecto a las fechas, tiempo de planeación, actividades y preferencias, diferenciando a los visitantes nacionales de los extranjeros, así como los circuitos que toman entre otros datos. 

Finalmente, en la cuarta fase se fortalecieron las capacidades digitales de los prestadores de servicios mediante herramientas como chatbots, inteligencia artificial y lentes de realidad virtual, para que comprendan las nuevas tendencias tecnológicas.

“La planificación ayudó a identificar la identidad turística de la región, mapeó a los stakeholders, evaluó problemáticas y propuestas estratégicas, y realizó una evaluación y monitoreo. El resultado final es el Observatorio Turístico, accesible en una página web, donde se muestran los antecedentes del proyecto y los datos de oferta y demanda turística. Pueden escanear el código QR para acceder directamente a la página web https://sites.google.com/unifranz.edu.bo/uyuni-observatorio-2024/mapas?authuser=0 o buscar "Observatorio Turístico Uyuni" en las plataformas digitales.

Mediante este proyecto, Colque señala que los encargados de la promoción turística en la región ahora tienen una herramienta sumamente importante para brindar un mejor servicio a las comunidades y municipios participantes. 

“Asimismo, la capacitación tecnológica ayuda a la comunidad de Uyuni a entender las nuevas tendencias del mercado y a cumplir con las expectativas de los turistas, ofreciendo la mejor experiencia y servicio a los visitantes”, apunta.

Claudia Saavedra, docente de la carrera de AHT de Unifranz y mentora de este proyecto, señala que el proyecto tomó dos años, en los que los 16 estudiantes responsables recabaron datos y plantearon estrategias que hoy se encuentran plasmadas en una página web que podrá ser usada en beneficio de las comunidades cercanas al Salar de Uyuni.

“Esperamos que este producto pueda ayudar a la planificación turística de uno de los destinos más visitados de nuestro país”, agrega.

Uber Quispe Véliz, presidente de la Mancomunidad de la Gran Tierra de los Lípez, que aglutina a ocho municipios circundantes al Salar de Uyuni, agradeció a los estudiantes por su trabajo, el cual será de gran utilidad para el diseño de políticas en beneficio del turismo en la zona.

“Su trabajo es muy importante para ayudarnos a promocionar nuestros atractivos turísticos en todo el mundo. Esta página web nos permite fortalecer nuestra imagen para que todos los turistas puedan ver lo que ofrecemos aquí”, expresa.

Este proyecto forma parte de los proyectos integradores de la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de Unifranz, una metodología educativa que promueve el aprendizaje práctico a través de la resolución de problemáticas reales, aplicando los conocimientos adquiridos en el aula para transformar y mejorar las comunidades en las que se desarrollan.`